jueves, 6 de agosto de 2009

De qué lado estás?

Estupor es un estado neurológico entre el coma y la conciencia. Cualquier shock puede dejarte en estupor, esa ida y vuelta al abismo. Queda en estupor el paciente de un accidente automovilístico y tambien todo el universo circundante.
¿Cómo es que todo se tiñe de esta dolorosa irrealidad?. Mamá dice: En algún momento siento que me voy a despertar, esto que está pasando no es más que un mal sueño.
Y no despertamos nunca...Ni ante la muestra sincera de afecto de los amigos, ni ante la evidencia de que la vida es tan frágil y que cada día somos más y nos afectamos más en las ciudades.
Un día tu vida se reduce a trámites de internación, al dolor de la pérdida, al hospital asignado entre los millones de opciones. Un día somos tan ignorantes de lo que podemos hacer, nosotros que sabemos tanto!
Ese día el luto por el hermano que tenía y que ya no es el mismo. Ese hermano, con su rol de amor en la familia, en estupor. Solo, atrás de su cráneo abismal.

lunes, 13 de julio de 2009

estos egos

Reveo tus ojos en amor y en pavor
la belleza convulsa,
las letras y el poema que revelan
el misterio, el asombro.
Estabas entre mis ojos y el mundo.
Precioso, cristal de ver y de sentir.
El antes, calor y color, y el después...,
el hueco frio, el nido roto del alma
Los anhelos fueron puestos
en el vano umbral del encanto:
tus virtudes postergadas, mis pasiones refrenadas.
...y lo que fuimos
liberados en las habitaciones,
sueltos en el campo,
atrapados en la calle,
no alcanzó para hacer uno de tanto "tanto"
Presa de la imagen que armabas de mi para dar pena,
atada a tus verdades de lo que debe ser.
Herido por los cuchillos de mis antojos
y negado por las frivolidades y el miedo.
Y, tambien,
y, a pesar de eso,
toda la maravilla de conocernos en el otro.
y lo que ya no es
ni será
ni podrá volver a asomarse,
a palpitar como recreo
del vivir bajo la sombra de las muertes.
No te puedo pedir más de lo que puedas dar.
Nuestras miserias nos dejaron a la deriva
más tristes, mas viejos y, talvez, mas sabios.
Este adiós es el que empezó ese viernes.
Cuando nos disfrazamos de imbéciles enamorados
cuando creímos que el resto no importaba
y que el sol se ponía en el horizonte de la cama.